Resistiendo al amor de Mi Ex-Marido

Chapter 216



Capítulo216

-Esta no es la red interna de empleados del Grupo Romero, ¿cómo estás aquí?

Bella miraba a Elena con atención.

Elena devolvió el teléfono sin sentir culpa alguna y siguió hojeando los comentarios con mucho interés. No es el grupo de trabajo. Es un pequeño grupo de quejas que ellos crearon, Manuel me invitó a entrar.

Bella se rio ante la actitud de Elena. -Vaya, has desarrollado una buena red de contactos, no solo te has hecho amiga de Manuel, sino que también has logrado infiltrarte en el grupo interno del Grupo Romero.

Elena respondió: Es que también quería conseguir los últimos chismes de primera mano. Tranquila, nadie sabe nuestra relación, así que todo lo que dicen aquí es de corazón.

Bella se quedó sin palabras. This is the property of Nô-velDrama.Org.

En la habitación de la mansión, Anna estaba revisando unos documentos cuando el constante sonido de los mensajes de su teléfono la distrajo.

Su herida en la frente aún no había sanado por completo, por lo que no podía entrar en contacto con el agua. Por eso, no se unió a la actividad, sino que se quedó en la habitación estudiando el proyecto que había encontrado para Daniel.

Al escuchar tantos mensajes en el grupo de chat, Anna tomó su teléfono para ver si había alguna noticia importante.

Al abrirlo, vio las fotos de Pedro y Bella, y la sonrisa de su rostro desapareció de inmediato. Había varias fotos de ellos abrazados con intimidad, y en la mirada de Pedro se podía apreciar una ternura que parecía inconsciente hacia Bella.

Anna agarró el teléfono con fuerza, deseando poder romperlo en pedazos por ira.

Antes de venir, había confirmado con su secretaria que Pedro estaba solo.

¿Por qué Bella estaría allí, y encima mostrando abiertamente su afecto con Pedro?

Anna se obligó a calmarse y envió un mensaje a Claudia.

[¿Cómo es que aún no has hecho nada para mejorar tu relación con Bella?]

Nadie le daba información, siempre era más pasiva.

Claudia le devolvió la llamada de inmediato y dijo: -Señorita García, Bella ahora tiene mucha desconfianza hacia mí, no me hace caso en nada, por lo que no puedo apresurar las cosas.

-Entonces, ¿piensas dejar que siga así? -el tono de Anna no era nada amable.

Claudia respondió: -No te apresures, estoy siguiendo tus indicaciones. ¿Acaso no he restablecido las relaciones comerciales con la familia Fernández? Cuando todo esté arreglado, iré a visitar más a menudo al señor Fernández, y Bella naturalmente me prestará atención.

-¿Por qué Bella de repente se ha distanciado tono frío.

ti?-preguntó Anna con el ceño fruncido y en

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Claudia tampoco entendía esa situación. No sé qué pasó. Cuando actualizaste las redes sociales, le sugeri ir juntas a regañarte, pero ella no tuvo ninguna reacción. No me conformé y fui sola, luego le envié el video grabado, ¡y estaba enojada conmigo!

-Además, siento ella se ha vuelto mucho más inteligente, con más criterio propio

que Claudia agregó–Por eso esta vez no me atrevo a menospreciarla y planeo empezé con el señor Fernández.

En realidad, no solo Claudia tenfa esa impresión, Anna también la notaba.

Bella se había vuelto más lista, ya no se dejaba provocar fácilmente ni actuaba impulsivamente.

Incluso daba la impresión de no tener interés en Pedro.

Anna no creía que Bella realmente no sintiera nada por Pedro, sino que simplemente había desarrollado más habilidades, sabía aprovechar las debilidades de los hombres y entendía que lo inalcanzable es lo más deseable.

Eso había hecho que Pedro también la prestaba más atención.

Dado el panorama actual, era evidente que no serviría de nada exacerbar las contradicciones entre Pedro y Bella.

Anna nunca había logrado descifrar del todo los pensamientos de Pedro.

A pesar de los disparates que Bella había cometido, Pedro solo mostraba fastidio, pero jamás la idea de divorciarse.

Si bien la anciana Romero los presionaba, Pedro tenía los medios para separarse si quisiera.

Ya que no podía atacar por ese lado, tendría que hacerlo a través de Bella.

Después de todo, incitar a una mujer era mucho más sencillo que a un hombre.

Anna se calmó y suavizó el tono al hablar con Claudia:

tus beneficios.

Continúa con lo tuyo, no te faltarán

-Por supuesto, tú nunca me has perjudicado. Pero necesito tu ayuda para cerrar el trato con la familia Fernández.–solicitó Claudia.

Anna asintió. De acuerdo.

Tras finalizar la llamada con Claudia, Anna hizo un par de llamadas y luego apagó la computadora para cambiarse de ropa.

Manuel fue directo a Villa Nube

-Hermano Pedro, ¿qué significas? ¿Por qué no puedo llamarte directamente? ¿Tengo que hablar primero con el asistente Martín?

En ese momento, Pedro estába recostado bajo la sombrilla, con ánimo más tranquilo, sin ganas de discutir con Manuel.

Con cierta pereza, preguntó: -¿Qué necesitas?

Manuel respondió: -Venía a avisarte que esta noche tendré que cenar con mi padre, así que no podré ir. ¡Pero tu comentario me ha molestado tanto que he decidido venir a reclamarte!

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Pedro entreabrió los ojos, echándole una mirada a Manuel. Había cambiado incluso su traje de baño, ahora llevaba gafas de sol, y su apuesto aspecto atraía miradas furtivas de varias mujeres.


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